Nuestra Historia

Una Historia de evolución

1938-1958 (Fundación y comienzos)

La historia de la empresa comienza en 1938, cuando Don David Sartor, hijo de inmigrantes italianos, decide iniciarse en el comercio local. Lo hace en un pequeño salón alquilado ubicado sobre la calle Güemes, en Charata, dedicándose al rubro de Ramos Generales. Esta etapa inicial refleja el espíritu emprendedor de Don David, quien con esfuerzo y dedicación sentó las bases de lo que luego sería una de las empresas referentes en la región.

Con el paso de los años y un país en crecimiento, en 1950 se abre una nueva oportunidad: las importaciones realizadas por la firma Agar-Cross permitieron a Don David incorporar a su oferta tractores e implementos agrícolas de la marca John Deere. Esta decisión marcaría un punto de inflexión en la historia de la empresa, orientándola hacia el sector agroindustrial y estableciendo una relación que sería clave en su desarrollo futuro.

Finalmente, en 1958, con la instalación de la fábrica de John Deere en Argentina, se produce un hecho decisivo: la empresa es nombrada Concesionario Oficial en Charata, formalizando un vínculo que ya venía construyéndose. Este momento también marca el nacimiento de la sociedad «David Sartor e Hijos Sociedad Mercantil Colectiva», que comienza a consolidar una estructura empresarial familiar.

Hitos Significativos

  • 1938: Don David Sartor, hijo de inmigrantes italianos, abre un salón de ventas de ramos generales en calle Güemes (700/800), Charata 

  • 1950: Comienza a importar y vender tractores e implementos agrícolas John Deere mediante la firma Agar‑Cross .

  • 1958: Con la inauguración de la fábrica John Deere en Argentina, se designa a la empresa como concesionario oficial en Charata. Esa estructura operativa se denomina “David Sartor e Hijos Sociedad Mercantil Colectiva”, integrada por Don David, su hijo David y Carmen Sartor de Liva.

1958 - 1996 (Crecimiento e institucionalización)

La consolidación de la empresa comenzó a tomar forma a partir de 1958, cuando, gracias a la instalación de la fábrica de John Deere en Argentina, David Sartor e Hijos fue nombrado Concesionario Oficial en la ciudad de Charata. Este hecho no solo reafirmó la confianza que la marca tenía en la empresa, sino que también marcó el inicio de una nueva etapa institucional con la creación de la “Sociedad Mercantil Colectiva”, integrada por Don David Sartor, su hijo David y su hija Carmen Sartor de Liva.

Durante las décadas siguientes, la empresa se fortaleció como referente en la venta de maquinaria agrícola en la región, acompañando el crecimiento del campo argentino y posicionándose cada vez más cerca de sus clientes. A medida que pasaban los años, el liderazgo pasó a manos de David Sartor (hijo), quien desde la década del 60 tomó las riendas del negocio, dándole continuidad al legado de su padre con una mirada moderna y proactiva.

La vocación por el trabajo, la cercanía con el productor y la visión empresarial llevaron a la familia Sartor a ampliar sus horizontes. En 1973, se dio un nuevo paso con la adquisición del primer campo destinado a actividades ganaderas y, más adelante, agrícolas. Esta decisión permitió diversificar el negocio y comenzar a construir una base productiva propia.

Ya en los años 90, la empresa comenzó a ser reconocida por su performance comercial a nivel nacional. En 1995, 1996 y 1997 recibió importantes premios otorgados por Industrias John Deere Argentina por alcanzar el mayor volumen de ventas de repuestos dentro de toda la red del país. En 1996, además, se destacó por la venta de pulverizadoras autopropulsadas, otro hito que reflejaba el compromiso y la eficacia del equipo de trabajo.

Ese mismo año se produce un cambio institucional clave: la empresa deja atrás la figura de Sociedad Colectiva y se transforma en Sociedad Anónima. En este nuevo esquema se incorporan como accionistas dos representantes de la tercera generación familiar: Marcelo David Sartor, contador público que ya formaba parte del equipo desde 1993, y Alejandro Rafael Sartor, ingeniero agrónomo que había ingresado en 1995. Con ellos, comenzaba a escribirse el próximo capítulo de una empresa que ya era sinónimo de confianza en el sector agropecuario chaqueño.

Hitos Significativos

  • Década de 1960: La segunda generación (David hijo) asume oficialmente la dirección de la compañía .

  • 1995: Recibe premio por mayor volumen de repuestos.

  • 1996: Recibe premios por mayor venta de repuestos y pulverizadoras autopropulsadas; se transforma en Sociedad Anónima, incorporando como accionistas a Marcelo David Sartor (contable, ingresado en 1993) y Alejandro Rafael Sartor (ingeniero agrónomo, ingresado en 1995)

1996 - 2008 (Consolidación y modernización)

En 1996, tras convertirse en Sociedad Anónima e incorporar a Marcelo y Alejandro Sartor como nuevos accionistas, la compañía parecía encaminarse hacia un futuro prometedor, combinando experiencia con nuevas ideas. Sin embargo, el destino marcaría un momento doloroso y desafiante: el 15 de septiembre de 1999, David Sartor (hijo), quien había liderado la empresa durante décadas, fallece trágicamente en un accidente automovilístico. Su partida dejó una huella imborrable en la historia familiar y empresarial.

A pesar del dolor, sus hijos tomaron la posta con entereza y responsabilidad. Marcelo y Alejandro asumieron la dirección con el acompañamiento de su madre, Estela Maris Corredera, y de su hermano Fernando. En 2001, se formaliza este nuevo esquema societario con la salida de Carmen Sartor de Liva y la integración definitiva de los tres hermanos como accionistas principales, junto a su madre.

En 2003, la empresa da un paso firme hacia la modernización y crecimiento con la inauguración de su nuevo local en Avenida Güemes 1515. Un predio de 12.000 metros cuadrados con instalaciones de primer nivel, preparado para dar respuesta a la creciente demanda del sector agroindustrial: más espacio para maquinarias, un taller de servicio mecánico completamente equipado, oficinas amplias y un moderno depósito de repuestos y lubricantes. Era el reflejo físico de una empresa en plena expansión.

Durante estos años, David Sartor e Hijos S.A. no solo consolidó su presencia comercial, sino que también comenzó a destacarse a nivel nacional. En 2005 fue reconocido por John Deere Argentina como el Mejor Concesionario del país, obteniendo el mayor puntaje en la evaluación integral de concesionarios. Le siguieron otros logros importantes: en 2007 y 2008 recibió el premio por el mayor volumen de colocación de préstamos de John Deere Credit, reflejo del compromiso financiero y la confianza que el productor depositaba en la empresa.

En 2008 se cumplieron dos aniversarios significativos: los 50 años como concesionario oficial John Deere en Argentina y los 70 años de historia en Charata y la región. La firma celebró ambas fechas con orgullo y recibió, además, el reconocimiento de John Deere como “Concesionario de Clase Mundial”, una distinción otorgada solo a quienes alcanzan los más altos estándares de calidad y profesionalismo dentro de la red global.

A lo largo de esta etapa, también se profundizó la actividad agropecuaria. A las tierras adquiridas previamente se sumaron nuevas propiedades en Santiago del Estero y Santa Fe, alcanzando hacia 2007 un total de aproximadamente 21.500 hectáreas. La actividad agrícola comenzó a ganar protagonismo, lo que llevó a replantear el funcionamiento interno.

Así, en los últimos años de esta etapa, la empresa comenzó a trabajar con un asesor especializado en empresas de familia. El objetivo era claro: ordenar la toma de decisiones, preparar el camino para las próximas generaciones y asegurar la continuidad del negocio. Este proceso sería la antesala de los grandes cambios organizativos que llegarían con la década siguiente.

Hitos Significativos

  • 1999 (15 de septiembre): Fallece David Sartor (hijo) en accidente automovilístico. La conducción pasa a Marcelo y Alejandro Sartor.

  • 2001: Cambia composición accionaria: se retira Carmen de Liva y entran Marcelo, Alejandro, Fernando Sebastián y la madre Estela Maris Corredera de Sartor.

  • 2003 (7 de abril): Se inaugura la moderna sede en avenida Güemes 1515, con 12.000 m² para maquinarias, repuestos y taller.

  • 2005: Recibe el premio al “Mejor Concesionario de Argentina” por John Deere Argentina.

  • 2007: Inicia trabajo con un asesor familiar para mejorar la gobernanza en sucesión.

  • 2007–2008: Premios de John Deere Credit por mayor colocación de préstamos

  • 2008: Celebran 50 años como concesionario JD en Argentina; también 70 años operando en Charata; reciben distinción como “Concesionario de Clase Mundial”

2008 - 2015 (Diversificación y profesionalización)

Luego de cumplir 70 años de trayectoria en la región y celebrar 50 años como Concesionario Oficial John Deere, la empresa decide mirar hacia adentro y repensar su estructura. Los desafíos del crecimiento, la complejidad operativa y el futuro generacional impulsan un cambio necesario: pasar de una gestión puramente familiar a una organización más profesionalizada.

Como resultado de este proceso, en abril de 2010 se incorpora por primera vez un gerente general externo a la familia: el Licenciado en Administración de Empresas Hugo Daniel Amuchastegui. Su rol sería clave en la conducción operativa del día a día, en el contacto con John Deere y en la toma de decisiones comerciales. Mientras tanto, Marcelo y Alejandro Sartor asumen el rol de directores estratégicos, acompañados por su hermano Fernando y su madre Estela Maris Corredera de Sartor. Este nuevo esquema combinaba experiencia, visión familiar y gestión profesionalizada.

En paralelo, el crecimiento de la actividad agropecuaria había alcanzado una magnitud tal que requería su propio espacio de desarrollo. Así, en 2009 se concreta una escisión clave: nace Agropecuaria Don David S.A., una nueva sociedad que tomaría a su cargo la totalidad de la actividad agrícola y parte de la ganadera. La empresa ya contaba con más de 21.000 hectáreas distribuidas entre Santiago del Estero y Santa Fe, y esta reestructuración permitía gestionar el negocio agropecuario con un enfoque más especializado y eficiente.

Durante estos años, la empresa mantuvo su liderazgo como concesionario John Deere en la región, fortaleciendo el vínculo con los productores y mejorando sus servicios de postventa, repuestos y financiación. La incorporación de nuevas tecnologías, un mayor nivel de profesionalismo y una mirada orientada al cliente marcaron el tono de esta etapa.

En el año 2015, se formaliza una nueva etapa en la vida institucional: la composición accionaria queda dividida equitativamente entre los tres hermanos: Marcelo David Sartor (33,34 %), Alejandro Rafael Sartor (33,33 %) y Fernando Sebastián Sartor (33,33 %). Este esquema refleja un compromiso compartido con los valores que heredaron y una visión de futuro conjunta.

La empresa llega a esta etapa con una estructura sólida, saneada financieramente, capitalizada y con una fuerte presencia en el sector agroindustrial del norte argentino. A lo largo de estos años, David Sartor e Hijos S.A. supo combinar tradición y evolución, manteniéndose fiel a los principios que la vieron nacer: seriedad, compromiso, cercanía con el productor y pasión por el trabajo bien hecho.

Hitos Significativos

  • 2009: Escisión: se crea “Agropecuaria Don David S.A.” para manejar la actividad agrícola (y parte de ganadera).

  • 2010 (abril): Se incorpora un gerente general, Hugo Daniel Amuchastegui (Lic. en Administración), para encargarse de operaciones; Marcelo y Alejandro retienen funciones estratégicas.

  • 2015: La sociedad queda dividida en partes iguales entre Marcelo, Alejandro  y Fernando.

2015 - Actualidad

Tras consolidarse en 2015 como una empresa familiar de tercera generación, con la participación equitativa de los hermanos Marcelo, Alejandro y Fernando Sartor, David Sartor e Hijos S.A. ingresó en una etapa de expansión sostenida y evolución constante. Ya no se trataba solo de mantener una trayectoria: el nuevo desafío era crecer sin perder la esencia.

Hoy, la empresa cuenta con más de 90 empleados y una estructura operativa sólida, que supera los límites de Charata. A la casa central se sumó una sucursal en Bandera, Santiago del Estero, y presencia en Quimilí, donde ofrece servicios de posventa, fortaleciendo así su alcance regional y la cercanía con sus clientes.

La apuesta por la tecnología ha sido un eje clave de esta etapa. Desde la incorporación de soluciones digitales hasta la incursión en el comercio online, todo está orientado a ofrecer una experiencia más ágil, moderna y centrada en el productor. Esta evolución no solo se refleja en las herramientas que utilizan, sino también en su propuesta comercial: además de ser concesionario oficial John Deere, la empresa amplió su portafolio de marcas y productos, incorporando firmas como Pla, Teejet, DeepAgro, Vapormatic, AI Products y Titan, ofreciendo así una gama más completa para las distintas necesidades del agro.

El compromiso con la comunidad también forma parte del ADN de la empresa. A lo largo de estos años, David Sartor e Hijos ha desarrollado acciones solidarias y se ha sumado a iniciativas con impacto ambiental. Entre ellas, destaca su participación en el programa de John Deere por el cual, por cada máquina vendida, se plantan tres árboles. Gracias a esta acción, ya se han plantado más de 600 árboles, reafirmando el compromiso con la sostenibilidad y el futuro.

Este presente encuentra a la empresa firme en sus valores fundacionales, pero con la mirada puesta en lo que viene. Profesionalismo, cercanía, innovación y responsabilidad son los pilares que guían esta etapa, siempre con el productor en el centro y con el mismo compromiso de aquel primer día en 1938.

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David Sartor e Hijos S.A. es una empresa familiar con una historia marcada por el esfuerzo, la innovación y el compromiso con la comunidad agropecuaria. Fundada en 1938 por Don David Sartor —hijo de inmigrantes italianos—, la compañía inició sus actividades con un pequeño comercio de ramos generales ubicado en Güemes 700–800, Charata, Chaco.

La visión emprendedora de Don David lo llevó, en 1950, a comenzar la comercialización de tractores e implementos agrícolas de la marca John Deere, actuando como concesionario de la firma Agar Cross.

Con la instalación de la fábrica de John Deere en Argentina en 1958, David Sartor e Hijos S.A. fue designada concesionaria oficial de John Deere Argentina, siendo en la actualidad una de las más antiguas del país.

En la década del 60, la conducción de la empresa pasó a manos de David Sartor (hijo), acompañado por su hermana, Carmen Sartor.

En 1996, se llevó a cabo la transformación de la Sociedad Mercantil Colectiva en Sociedad Anónima. En ese proceso, se incorporaron como accionistas Marcelo David Sartor (Contador Público, quien se sumó a la empresa en 1993) y Alejandro Rafael Sartor (Ingeniero Agrónomo, quien comenzó en 1995). Ambos continúan actualmente liderando la organización, honrando el legado familiar con una mirada estratégica, sostenible y orientada al futuro.

En 2005, Industrias John Deere Argentina S.A. reconoció a la empresa como el Mejor Concesionario de la República Argentina, tras obtener el mayor puntaje en la Evaluación de Concesionarios, gracias a los altos niveles de excelencia alcanzados en las distintas áreas de gestión.

En los años 2009 y 2015, Sartor recibió de John Deere el reconocimiento de Concesionario Clase Mundial, distinción que destaca el profesionalismo y la alta calidad en la operación.

Actualmente, David Sartor e Hijos S.A. cuenta con más de 90 colaboradores, una casa central en Charata (Chaco), una sucursal en la ciudad de Bandera y un nuevo punto en desarrollo en Quimilí, ambas en la provincia de Santiago del Estero.

Como concesionario oficial de John Deere y PLA, la empresa ofrece soluciones integrales en tecnología agrícola, a través de la venta de maquinaria, repuestos y servicios técnicos especializados, con un fuerte enfoque en la sostenibilidad ambiental. Este compromiso responde no solo a los exigentes estándares de las marcas que representa, sino también a una convicción profunda y sostenida de contribuir activamente al desarrollo sustentable del sector agropecuario.